A todos nos ha atraído alguna vez un establecimiento sólo por los colores, las texturas, la decoración, o hasta quizá por el olor que desprendía, y por eso hemos acabado entrando. Como alumna del grado superior de asesoría de imagen os analizaré los detalles.
Si además de tener todos estos factores positivos externos, los empleados nos reciben con una gran sonrisa, un buen saludo, un vocabulario formal y con educación, es previsible que nos sintamos más a gusto. Esto hace que nuestra consideración sea más profesional, nos guste más el sitio, y probablemente incluso acabemos consumiendo. De eso se trata una buena imagen corporativa, una estrategia de venta.
Está claro que es importante tener un buen producto, pero muchas veces los seres humanos no nos conformamos solo con eso, pues es importante la repercusión psicológica que nos produce este tipo de factores positivos. Es decir, nos llaman la atención las cosas que nos entran por los ojos, y más aún si nos deleitan los oídos y nos hacen sentir especiales. Tampoco hemos de olvidar que los proveedores tienden a dar más confianza y respeto a priori a empresas con buenas imágenes corporativas; profesionalmente desarrolladas y establecidas.
En conclusión: una buena imagen corporativa es importante, tanto para motivar a los empleados a trabajar como para la atracción de los clientes hacia esta determinada empresa.
Imagen extraída de Viktor & Rolf
Escrito por Estela Navarro
Estudiante de Curso de CFGS Asesoría de imagen personal y corporativa en Thuya Escuela
Los alumnos presentaron sus propuestas donde ofrecieron su versión de un perfume existente modificando la imagen real de una firma.
Las ganadoras fueron elegidas a través de una votación por parte de los alumnos y profesores de la escuela.
El primer premio fue otorgado a Sara Sanchez, el segundo premio a Cristina Camero y finalmente, el tercer premio se lo llevó Elsa Sabater.
¡Muchas felicidades!
Os dejamos con algunas fotos de la exposición.